Entre las clases y el trabajo en casa me queda poco tiempo para todo lo demás. Esta semana he ocupado casi todo ese resto para preocuparme por yo. Así es, he sido la mas egoísta pero lo he hecho para alcanzar objetivos que alimenten un poco mi ego y eso es suficiente pretexto para mi. No es una tarea fácil, me siento agotada, vulnerable al fastidio y también he encontrado un agrado retorcido por llevarme a los extremos de mi capacidad humana (no desayunar, 60 bocetos en una noche, pero no dormir es mi favorita) por encontrar oportunidades de evadir responsabilidades ((un verso sin esfuerzo (como asistir a clases, lavar trastes, ayudar a alguien)) que no contribuyan con mis objetivos.
Odio saber que no duraré mucho en este estado, me conozco tan bien que cuando entro a una etapa ya estoy distinguiendo su final, pero a veces poner la coraza de “me valen madres los demás” es un síntoma sano de supervivencia y a mi me encanta, así que no estoy tan mal ¿no?, mientras mi otros queridos compañeros de vida sigan optando por fastidiarme seguiré deseando que no me estorben.
Un gran beso a las otros "otros" que permanecen y que hacen de muchos momentos compartidos una delicia.
1 comentario:
Guapa se te esta haciendo costumbre no cres???
Vale, te mando un besote
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